[resumen.cl] Este viernes en la tarde se realizó una velatón en los Tribunales de Justicia de Concepción en memoria de Jorge Salvo, víctima de trauma ocular quien se suicidó este miércoles en la Región Metropolitana. Se trata de la cuarta víctima de trauma ocular por disparo de perdigones que se suicida en medio del ambiente de abandono estatal e impunidad para los agentes represores.

En conversación con Resumen, Rodrigo Lagarini, sobreviviente de trauma ocular durante el Estallido Social en la Región del Biobío fue enfático en apuntar a la responsabilidad del Estado. «Jorge no se suicidó sino que lo mató el Estado, correspondía una reparación, correspondía que hubiera un seguimiento para ver su estado mental«.

Rodrigo recuerda que Jorge participó activamente en las protestas populares del Estallido Social contra el abuso empresarial de décadas sobre la población en Chile. «Fue un incansable luchador, estuvo en Santiago todos los viernes en la calle, dando su vida por igualdad y por justicia por todas las violaciones a los derechos humanos que han habido en la historia de Chile» señala.

Jorge Salvo también participó en la toma de la sede del INDH debido a las insuficiente cobertura del llamado PIRO (Programa Integral para la Reparación Ocular). Un programa calificado como «Nefasto, horrible y revictimizante» y que ahora fue cambiado, sin embargo las críticas persisten.

«No puede haber más gente quitándose la vida, Patricio Pardo, Jonathan Vega, un compañero en situación de calle, y ahora Jorge Salvo» recuerda.

La situación en el Biobío y la sombra de la impunidad policial para atacar al pueblo movilizado

Consultado por la situación en la Región del Biobío, Rodrigo señala que son cerca de 10 personas con traumas oculares contabilizados, pero «puede que hayan otros que quizás no haya salido, porque hay personas que no han querido salir a exponerse» explica.

«Dentro de estas personas son muy pocas las que tienen alguna demanda, un juicio con un abogado, el INDH se comprometió con abogados en un principio pero ahora nos ha abandonado» y concluye que » Son muy pocos los casos que han avanzado».