Ninguna imagen más impactante por lo cruel, difundida por algunos medios de prensa, principalmente la televisión del país, ha sido aquella en que se ve a un pequeño niño - de tres años - intentando escapar a través de un muro de un recinto de SENAME en la Quinta región. Sucedió hace pocos días.

Decir que esa imagen refleja un signo de crueldad extrema es todavía insuficiente. En lo sucedido hay más que todo eso, agréguese abandono, desamparo total y el cuadro será aún más patético, más dantesco.

Un calificado profesional psiquiatra, también otros profesionales, han declarado que nuestra sociedad vive un estado de severo desequilibrio mental, producto de una acumulación de sucesos que han ocurrido, y que no cesan de manifestarse. La suma de esos episodios es también reflejo de un estado de decadencia humana, moral y social.

¿ Qué puede existir más indefenso que un niño ? Es un sagrado ser que no eligió venir a este mundo.

Recuérdese otro episodio protagonizado también por niños del SENAME de Puerto Montt. La imagen de entonces mostraba a varios menores intentado escapar,fugarse por las techumbres del recinto con una pancarta que decía " Queremos jugar " . ¡ Qué golpe más brutal a la conciencia y a la sensibilidad humanas !

Por estos días las informaciones que señalan las muertes de centenares de niños ocurridas al interior del SENAME, sumados múltiples casos de una diversidad de maltratos, agresiones físicas y psicológicas a los menores han terminado por develar un espantoso cuadro de la miseria moral de esta sociedad,ya colapsada casi por donde se la tome.

Los niños, también jóvenes que a ese Servicio llegan son hijos de la miseria, son hijos de nuestro pueblo, les tocó nacer en el desamparo y en el desprecio, tal vez por eso para otros nada valen.

Como suele sucedernos... Hay culpas, inculpados, responsables, también la manida, consabida carencia de recursos. No existen políticas de Estado y cuando son parciales agudizan los problemas y conflictos. Nos pasa que todo es periférico, nada va a la raíz y todo es para después...

Carlos Poblete Ávila
Profesor de Estado
Director Centro de Estudios
Conciencia Crítica

Chile, agosto 27 de 2016.