El presidente de Colombia aseguró que «la guerra contra las drogas ha fracasado». «¿Quieren menos drogas? Piensen en menos ganancias», dijo ante la Asamblea General de la ONU. Las palabras de Petro ponen de manifiesto el fracaso de la política impulsada por Estados Unidos.
Por Alejandro Baeza
En su intervención ante la 77 Asamblea General de Naciones Unidas, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, pidió acabar la «irracional» guerra contra las drogas que destruye la Amazonía.
«Yo les demando desde aquí, desde mi Latinoamérica herida, acabar con la irracional guerra contra las drogas. Disminuir el consumo de drogas no necesita de guerras, necesita que todos construyamos una mejor sociedad», señaló el mandatario en su primera intervención en la ONU.
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Además, también señaló que «la lucha contra la crisis climática ha fracasado». «¿Quieren menos drogas? Piensen en menos ganancias y en más amores. Piensen en un ejercicio racional del poder. No toquen con sus venenos la belleza de mi patria, ayúdennos, sin hipocresías, a salvar la selva amazónica para salvar la vida de la humanidad en el planeta», dijo.
"¿Qué es más venenoso para el ser humano? ¿La cocaína o el carbón y el petróleo?", se preguntó Petro. "El dictamen del poder ha ordenado que la cocaína es el veneno y debe ser perseguida así ella solo cause mínimas muertes por sobredosis, y más por las mezclas que provoca su clandestinidad dictaminada".
Petro aseguró que «la selva que se intenta salvar es al mismo tiempo destruida» y puso como ejemplo el uso del herbicida glifosato para erradicar cultivos ilícitos en Colombia.
«Para destruir la planta de coca arrojan venenos, glifosato en masa que corre por las aguas, detienen a sus cultivadores y los encarcelan. Por destruir o poseer la hoja de la coca muere un millón de latinoamericanos asesinados y encarcelan a dos millones de afros en la América del Norte», expresó calificando de «hipócrita» el discurso de los países desarrollados para salvar la selva, que «se quema mientras ustedes hacen la guerra y juegan con ella».
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El presidente colombiano indicó también que «cuando más se necesitaban las acciones, cuando los discursos ya no servían, cuando era indispensable depositar los dineros en los fondos para salvar la humanidad, cuando había que alejarse cuanto antes del carbón y del petróleo se inventaron una guerra y otra y otra. Invadieron Ucrania, pero también Irak y Libia y Siria. Invadieron en nombre del petróleo y del gas».
Petro añadió a su vez que «el desastre climático matará centenares de millones de personas» y que su principal causa es «el capital», así como «la lógica de relacionarnos para consumir cada vez más, producir cada vez más, y para que algunos ganen cada vez más». En su defensa de la selva amazónica, propuso que se usen con ese fin recursos de la comunidad internacional, en una especie de trueque de «deuda por vida, por naturaleza».
«Si no tienen la capacidad para financiar el fondo de la revitalización de las selvas, si pesa más destinar el dinero a las armas que a la vida, entonces reduzcan la deuda externa para liberar nuestros propios espacios presupuestales y con ellos realizar la tarea de salvar la humanidad y la vida en el planeta. Lo podemos hacer nosotros si ustedes no quieren», subrayó.
Finalmente, concluyó que "por destruir o poseer la hoja de la coca muere un millón de latinoamericanos asesinados y encarcelan a dos millones de afros en la América del Norte".
Además de los daños medioambientales indicados por el mandatario de Colombia, la llamada «guerra contra las drogas» impulsada por Estados Unidos -principal país consumidor de drogas en el mundo- no ha hecho sino aumentar el crimen organizado y el tráfico de armas, así como asesinatos, trata de personas y secuestros, entre otras.
La palabras de Gustavo Petro deben apuntar a superar esta política fracasada y generar una nueva política coordinada entre países de América Latina para acabar con uno de los principales problemas que azotan a nuestros pueblos como lo es el narcotráfico y el crimen organizado en general. No sólo acabar con la desigualdad social como principal forma principal factor de la criminalidad, como lo plantean diferentes organismos como el mismo Banco Mundial, sino también dejar de perseguir a consumidores como delincuentes y tratarlos como enfermos con toda la institucionalidad de los Estados para brindar ayuda y tratamiento, asimismo, entrar en el mercado de drogas de manera legal a través de monopolios estatales de venta legal (o incluso regalar, debe estudiarse) para disputar y acabar con el nicho de mercado desregulado que se extiende como un cáncer por nuestros pueblos.