[resumen.cl] El sostenido avance del paramilitarismo en territorios de México ha sido denunciado por diferentes organizaciones, como el Congreso Nacional Indígena. Acusan, entre otras cosas, una guerra contra comunidades zapatistas y la impunidad en el ejercicio de órganos paramilitares en Chiapas.
Desde hace semanas, comunidades indígenas de México han denunciado la presencia y avance de organizaciones paramilitares en los territorios donde se encuentran.
El pasado 22 de agosto, grupos paramilitares habrían atacado bases de apoyo zapatista ubicadas en el Caracol Moisés Gandhi. Según la información recopilada, las comunidades apuntarían a la participación de la Organización de Cafeticultores de Ocosingo (ORCAO) como los responsables del saqueo de bodegas de café y la quema del centro de comercio Nuevo Amanecer.
Estas acciones, sostenidas en el tiempo en Chiapas y a lo largo de México, han decantado en la denuncia pública planteando el «Alto a la Guerra» contra las y los zapatistas.
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En este marco, el Congreso Nacional Indígena (CNI), espacio constituido en 1996 para el encuentro y apoyo de las luchas de los pueblos indígenas del país, también ha declarado acciones provenientes del paramilitarismo.
La muerte de Pedro Alejandro Jiménez Pérez el pasado 11 de septiembre en Tila -Chiapas-, declaran, se desarrolló cuando el «grupo paramilitar Paz y Justicia junto con personas allegadas al Ayuntamiento municipal, atacaron con armas de grueso calibre a la población de Tila que, por acuerdo de la asamblea general, se dirigía a liberar los bloqueos que estos grupos habían instalado en los accesos a la cabecera del ejido para cercar a nuestro pueblo, donde los paramilitares habían destruido un portón de seguridad el pasado 25 de agosto«.
Estas acciones han desencadenado una ofensiva comunicacional contra las comunidades indígenas en resistencia, cuestión que el propio Ejido de Tila ha desmentido acusando la presencia paramilitar en la zona.
Mientras tanto, las comunidades se encuentran en alerta ante la ofensiva que se vive. En este sentido, han realizado campañas y acciones de solidaridad tanto presencial como virtualmente.
Asimismo, organizaciones espacios como Kongra Star y Europa Zapatista han dado su respaldo a las comunidades, sumándose a las denuncias públicas.