[resumen.cl] La cámara aprobó la prohibición de instalación y el cierre definitivo de las plantas a carbón que existen en Chile para el años 2025. Esto constituye un nuevo golpe para el gobierno de Piñera el cual había propuesto un cierre gradual y voluntario de las empresas energéticas a carbón, con fecha tope para año 2040. Sin embargo, la iniciativa debe volver a la Comisión de Medio Ambiente para el análisis de indicaciones, las cuales podrían relativizar el anuncio.
Las termoeléctricas tienen impactos globales y locales. Entre estos últimos encontramos la exposición de la población a metales pesados y contaminantes en el aire, así como la perturbación de ecosistemas terrestres y marinos. Entre los impactos globales encontramos la emisión de gases de efecto invernadero a partir de la quema del carbón, que potencian el cambio climático que está teniendo efectos catastróficos en comunidades y la biosfera en general.
En el Biobío tenemos varias comunas con termoeléctricas, el caso más emblemático el que se vive en Coronel, que alberga 3 termoeléctricas a carbón en pleno radio urbano de las empresas COLBÚN y ENDESA.
La cámara aprueba el proyecto en un momento en que se debate la necesidad urgente de cambios en materia socioambiental en el país. La débil regulación e institucionalidad ambiental, la falta de normas en torno a contaminantes en el ambiente y la profundización del modelo de explotación extractivista mantiene a comunidades y ecosistemas al borde del colapso en diferentes puntos del país.
La aprobación de la nueva constitución, abre nuevos caminos para abordar una de las problemáticas más profundas que tiene el país.
Cabe destacar que la iniciativa debe volver a la Comisión de Medio Ambiente para el análisis de indicaciones, las cuales podrían relativizar la prohibición y la fecha de cierre total de las termoeléctricas a carbón en Chile.
Noticia en desarrollo…